A pesar del retraso, tengo que decir que últimamente he estado pensando en los libros que me gustaría leer en este año, y para ello he elaborado una lista bastante interesante con una serie de objetivos que moldearán estas próximas lecturas. Estos objetivos están relacionados con lo que me gustaría que fuera mi vida lectora, apoyada en una serie de pilares que me definen y que también me ayuden a expandir mis horizontes.
Los grandes clásicos:
Siempre he sentido un gran respeto por esos escritores que han sido capaces de perdurar al paso del tiempo, y han logrado no solo obras que reflejaban la sociedad en la que vivían, sino que además han seguido siendo relevantes a pesar del paso del tiempo.
Un claro ejemplo sería Jane Austen, autora que por desgracia tengo un poco olvidada, pero de la que he disfrutado varias veces en el pasado. Otro ejemplo serían las hermanas Brontë, de las que aún tengo pendiente por leer un libro, se trata de “La inquilina de Wildfell Hall” de Anne Brontë y me gustaría leerlo lo más pronto posible ya que es un libro que no pude finalizar el año pasado y además en este 2020 se celebran los doscientos años del nacimiento de la autora inglesa. Otra de las grandes damas de la literatura inglesa es George Eliot, de la que me gustaría leer “El molino del Floss” una de sus obras más conocidas.
Dos autores más modernos que también me gustaría descubrir en este año son: F. Scott Fitzgerald y Mijaíl Bulgákov quienes curiosamente nos dejaron hace ochenta años. Del primero voy a intentar leer “El Gran Gatsby”, mientras que del segundo tengo pensado leer una de esas obras cumbre de la literatura Rusa como es “El maestro y Margarita”.
Sin olvidarnos de los autores y autoras contemporáneos:
Empezando con dos novelas nacionales que he elegido para este año: “Farándula” de Marta Sanz y “Canto yo y la montaña baila” de Irene Solà. Son dos novelas a las que les tengo muchas ganas, y que han ganado importantes premios en el panorama nacional como son el Premio Herralde de Novela (2015) y el Premi Llibres Anagrama de Novel·la (2019), respectivamente.
Pero también me gustaría aprovechar para encontrarme con autores que ya conozco y de los que he disfrutado recientemente, en esta categoría hay dos nombres que no pueden faltar nunca, ellos son Julian Barnes e Ian McEwan, dos de mis escritores favoritos, y de los que me gustaría ir leyendo todo lo que han publicado, y es por ello que tengo pendiente leer “La única historia” y “La ley del menor”.
Sin olvidarme de ese afán que no debe faltar en todo lector, me refiero al de intentar descubrir nuevos autores y nuevos libros. Mi descubrimiento personal será el de Philip Roth, un escritor del que nunca he leído nada, y que además ya me había propuesto leer el año pasado; de este célebre escritor estadounidense tengo un ejemplar de “Pastoral Americana” esperándome en mis estanterías. Otro de esos descubrimientos podría ser el de Joyce Carol Oates, autora de la que he leído un par de libros, pero con la que aún no me he estrenado en lo que se refiere a sus novelas, y es por ello que me gustaría poder dedicarle un buen par de semanas para leer con tranquilidad “La hija del sepulturero”.
Además como decía en el primer párrafo, este año estará marcado por una serie de desafíos, y uno de ellos es leer más literatura europea, una de mis grandes asignaturas pendientes. Para tratar de solucionarlo he decidido tirar de dos nombre de los grandes referentes de la literatura francesa más actual, uno de ellos es un viejo conocido como Patrick Modiano, y el otro es el de Annie Ernaux que fue distinguida con el premio Fomentor en 2019. Del primero me gustaría leer “Un pedigrí”, mientras que de la segunda me gustaría leer “Pura pasión” antes de saltar a sus novelas más de carácter autosociobiográfico.
Literatura Galega:
Es cierto que en los últimos años he leído bastante poesía de autores gallegos, sin embargo me parece que esto no es suficiente; y es por ello que en este año me gustaría vivir la experiencia completa leyendo no sólo más, sino que haciéndolo de una forma más completa.
El plan que he trazado en mi mente es bastante claro, leer a los grandes nombres de nuestra literatura como pueden ser Castelao “Os vellos non deben de namorarse” o Blanco Amor “A Esmorga”, sin perder de vista a los autores más actuales que han estado publicando obras en gallego en los últimos quince años.
Es por eso que he anotado varios títulos de libros que me han llamado la atención, empezando por “Carrusel” de Berta Dávila novela elegida como la mejor obra de narrativa del pasado año, o “As Ramonas” de Ana Cabaleiro que refleja el rural gallego de una forma muy interesante, y “Ollos de Auga” de Domingo Villar un libro que he empezado hasta en dos ocasiones y que intentaré finalizar en 2020.
Todo ello sin olvidarme de la poesía.
Latinoamérica:
Al igual que ocurre con la literatura Europea, la literatura latinoamericana es otra de esas asignaturas pendientes, y a pesar de ser consciente de que esta literatura ha aportado mucho y ha enriquecido la literatura universal, he de reconocer que siempre me ha costado salir de mi pequeña zona de confort anglófona. Pero teniendo en cuenta la grata experiencia de El festival de las letras hispanoamericanas, tengo pensado repetir en este 2020.
Pero en esta ocasión voy a jugar sobre seguro con dos escritores que ya conozco, y además voy a seleccionar un tercer nombre de una escritora actual que será nueva para mí. Empezando con “La casa de los espíritus” de Isabel Allende, he de decir que este es un libro que recibí como regalo en el verano de 2010, y aún está esperando turno para ser leído. Luego me gustaría leer algo más de Gabriel García Márquez, y para ello he seleccionado “El amor en los tiempos del cólera”. Y para terminar tengo pensado leer “Los ingrávidos” de la mexicana Valeria Luiselli, libro que encontré por casualidad en la biblioteca y espero poder finalizar pronto.